“Cada año, miles de personas participan en uno de los eventos más peligrosos del mundo”.

De esta forma tan tajante arranca “Encierro”, la película-documental que relata y describe lo que sucede cada mañana, desde las 06:00 hasta las 08:30, del 7 al 14 de julio en Pamplona.

Para mi opinión, se trata de un trabajo perfecto. Nadie antes había relatado de una forma tan auténtica, tan real y tan verdadera lo que se vive en esas calles. Nadie antes había mostrado al mundo exterior, al mundo real, las sensaciones de quienes corren el encierro. Y nadie antes lo había explicado con ese tajante realismo y sinceridad absoluta que hace que, por momentos, te emociones.

Y te emocionas precisamente porque en la película, sus protagonistas, expertos y reconocidos corredores del encierro, transmiten exactamente lo mismo que dirías tú si te pidieran opinión.  Resulta increíble oírlos transmitir exactamente los mismos sentimientos y emociones que tú has experimentado en el casco antiguo de Pamplona.

“Los 10-15 minutos previos de la carrera no paras de preguntarte, ¿pero qué coño estoy haciendo yo aquí? Con lo bien que estaría en mi casa tranquilo. Pero al día siguiente vuelves a estar en el mismo sitio y a la misma hora, para volver a experimentar lo mismo que el día anterior. Como te he dicho antes, esto es una droga dura que te engancha”.

Esta reflexión es la que más se repite a lo largo del documental. El hecho de reconocer la peligrosidad, (en ocasiones irresponsabilidad de quienes entramos al encierro) e incluso barbaridad que supone el encierro, es común a todos los que decidimos adentrarnos en él.

Yo no sabría explicar mejor las sensaciones que allí dentro se viven. Difícil de explicar y mucho menos de entender. Y por supuesto, imposible de entender para quienes no comparten esta fiesta.  

En otro orden de cosas, muchas caras conocidas en el documental. Caras que  hacen teletransportarte a la Pamplona que todos los aficionados y corredores añoramos durante todo un año entero.

Y momentos. Unos los has vivido y experimentado tú mismo, y ni siquiera te acuerdas del año, del día o incluso la ganadería, como el caso de esta imagen extraída del documental en la que aparezco bajando al callejón, con un toro de… Fuente Ymbro? Conde de la Corte? Dolores Aguiire? Miura? Victoriano del Río? El Pilar? Apostaría que se trata de un Fuente Ymbro pero no estoy seguro.

El momento más duro, el padre de Daniel Gimeno hablando para las cámaras. Momento duro, inexplicable y difícil. Pero de una lección humana y sensatez infinitas.

Os recomiendo que lo veais. Sin prisas, disfrutando de cada palabra y analizándola lentamente. Cada uno encontrará su propia explicación del porqué decidimos adentrarnos en el encierro de Pamplona.